La Provincia de Buenos Aires se prepara para un fin de semana marcado por el calor, con temperaturas máximas que rozarán los 30 grados , según informa el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
A pesar de la anticipación de altas temperaturas, también se vislumbran posibilidades de lluvias aisladas en el horizonte.
A partir de este sábado 17 de febrero, se espera un aumento progresivo de las temperaturas máximas, intensificando el calor en toda la región bonaerense. Aunque las posibilidades de lluvias para el sábado son bajas, existe la posibilidad de algún chaparrón aislado durante la madrugada.
Las mayores probabilidades de precipitaciones se presentan el domingo por la tarde, con la posibilidad de chaparrones aislados. Sin embargo, se destaca que estas lluvias no generarán descensos significativos en las temperaturas y se espera que no se extiendan más allá de las 16 horas.
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El Servicio Meteorológico Nacional advierte que, a pesar de las lluvias, una nueva ola de calor persistirá durante la semana siguiente.
A partir del miércoles 21 de febrero, se pronostica un aumento significativo de las temperaturas, con mínimas superiores a los 20 grados y máximas que sobrepasarán los 30 grados.
Esta tendencia se mantendrá de manera constante al menos hasta el próximo fin de semana, por lo cual la población debe prepararse para condiciones climáticas cálidas y estables en los días venideros.