A solo 300 kilómetros de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, se halla la localidad de Azul, un destino turístico único que combina historia, naturaleza y una arquitectura emblemática. Este rincón de la provincia de Buenos Aires se presenta como una alternativa ideal para aquellos que buscan un escapada corta sin alejarse de la capital.
¿Qué hace a Azul un destino atractivo para el turismo?
La belleza de Azul radica en su fuerte influencia arquitectónica, especialmente la del célebre Francisco Salamone. Su estilo Art Decó, presente en varios de sus edificios, es solo el inicio de lo que ofrece la localidad.
Los visitantes pueden disfrutar de espacios verdes como el Parque Municipal Domingo Faustino Sarmiento, que se extiende por 22 hectáreas y alberga vegetación exuberante, réplicas de un patio andaluz y la célebre Isla de los Poetas.
- Catedral Nuestra Señora del Rosario: Un símbolo de la estética gótica de la localidad, famosa por sus vitrales franceses.
- Museo Enrique Squirru: Un lugar ideal para conocer la historia local.
- Sierras de Azul: Consideradas entre las más antiguas del mundo, son un atractivo natural imperdible.
- Balneario Almirante Brown: Ofrece playas de arena, fogones y una isla, perfecto para disfrutar de actividades al aire libre.
¿Cómo llegar a este paraíso natural?
El acceso a Azul es simple y directo. La Ruta Nacional N° 3 conecta la Ciudad de Buenos Aires con esta localidad, haciendo del trayecto de 300 kilómetros una opción accesible. Alternativamente, las rutas provinciales y nacionales ofrecen diversas opciones para quienes deseen explorar los alrededores.
Ruta | Distancia (km) | Tiempo estimado |
---|---|---|
Ruta Nacional N° 3 | 300 | 3h 30min |
Ruta Provincial 51 | 340 | 4h |
Un viaje a Azul no solo propone un descanso alejado del ajetreo citadino, sino que también permite conocer una parte rica en historia y naturaleza de la provincia de Buenos Aires.