Pablo Grillo, un trabajador de prensa de 35 años, ha sido dado de alta tras permanecer 82 días en terapia intensiva debido a heridas graves sufridas durante una marcha de jubilados. El fotógrafo Kaloian Santos capturó el emotivo momento de su salida del Hospital Ramos Mejía, donde Grillo fue aplaudido por el personal médico y rodeado de su familia en un ambiente de gran alegría.
La emoción de su familia y colegas
Este martes, con un clima soleado, Grillo dejó la terapia intensiva para iniciar su rehabilitación en el Hospital Manuel Rocca. En una conversación con Futurock, su hermano, Emiliano Grillo, expresó su satisfacción por la atención recibida: “Lo público funciona. Hay fallas sí, hay que mejorar, pero eso no quiere decir que haya que erradicarlo”. Este respaldo a la salud pública llega en un contexto de críticas al gobierno por ajustes en este sector.
La salida de Grillo fue un momento cargado de emociones. Su familia, con lágrimas de alegría, celebró este hito tras el peligro que había enfrentado desde el 12 de marzo, día en que fue herido.
La lucha y el apoyo continuo
Kaloian Santos, un colega de Grillo, publicó un conmovedor mensaje en sus redes: “Salió con una sonrisa amplia y luminosa. A su lado, Mary, su madre, con los ojos vidriosos, pero esta vez de alegría”. Santos también destacó el compromiso de los médicos que salvaron a su amigo, describiendo su salida como la de un “sobreviviente”. La atención adecuada que recibió Grillo resaltó la importancia del sistema de salud pública en situaciones de emergencia.
Expectativas y la conexión con su trabajo
En días previos a su alta, Grillo expresó su frustración por permanecer en el hospital. Santos recordó que “Lo noté bajoneado. Me dijo que quería irse, que no aguantaba más estar ahí”. Sin embargo, su ánimo cambió cuando su padre le llevó una nueva cámara, un gesto que iluminó su rostro, simbolizando su deseo de retomar su vida y su pasión por la fotografía.
