A casi seis años de ser condenada a prisión perpetua por el asesinato de su novio, Nahir Galarza podría quedar libre luego que el sistema judicial entrerriano revelara que la bromatóloga Gabriela Laiño fue forzada a llevar a cabo pericias para las cuales no poseía la cualificación necesaria.
Una revelación inesperada
La bromatóloga decidió denunciar al Estado de la provincia y a la policía. Laiño afirmó que los fiscales la obligaron a llevar adelante un análisis a los celulares de Nahir Galarza y la víctima con el objetivo de hacerlo pasar como “peritaje informático”, pese a que ella es bromatóloga y no tiene esos conocimientos técnicos.
Además, la mujer denunció que sufrió grandes presiones de sus superiores, quienes la obligaron a participar del falso peritaje bajo la amenaza de ser despedida de su puesto.
La Justicia falló a favor de Gabriela Laiño y estableció que deberá recibir $14 millones como compensación por lo que le tocó vivir.
En un fragmento del dictamen se señala que los hechos descriptos por la especialista “han quedado corroborados con el resto del material probatorio rendido en la causa”.
Qué dice el documento oficial
“Las labores que se le exigieron a lo largo de su prestación de servicios, excedieron el ámbito de laboratorio, para donde fue nombrada como agente civil con prestación de funciones policiales en ese ámbito de la fuerza”, dice el fallo a favor de la especialista que declaró que realizó pericias falsas en el caso de Nahir Galarza.
El documento además remarca: “Las intervenciones como fotógrafa forense en el marco de realización de autopsias judiciales, la actora no tenía, ni debía tener tolerancia o resistencia física ni mental para ello, por su formación profesional de Bromatóloga”.
Respecto a la condena a prisión perpetua a Nahir Galarza, la Corte Suprema de la Nación decidió llevar a cabo un análisis en profundidad del expediente. Una vez finalizado el estudio se comunicará si realizarán algún cambio en la condena de la joven.
