Ante la aparición de un brote de encefalomielitis equina, se ha declarado la emergencia sanitaria en todo el país. Esta medida incluye acciones inmediatas, extraordinarias y de contención, con el objetivo de frenar la propagación del virus. Todos los detalles, en esta nota.
Qué es la encefalomielitis equina
La encefalomielitis equina es una enfermedad viral que afecta principalmente a los caballos, pero también puede afectar a los seres humanos. La infección se propagada por vectores, especialmente mosquitos infectados por aves, durante las épocas estivales, y existen varias cepas del virus que pueden causar síntomas variados. Aquí se describen los síntomas típicos asociados con la encefalomielitis equina:
- Fiebre:
- Tanto en caballos como en humanos, la enfermedad suele comenzar con fiebre repentina.
- Letargo y Debilidad:
- Los afectados pueden mostrar signos de letargo y debilidad generalizada.
- Cambios en el Comportamiento:
- En caballos, se observan cambios en el comportamiento, como irritabilidad, inquietud o depresión.
- Coordinación Alterada:
- Uno de los síntomas característicos es la ataxia, o falta de coordinación motora, que se manifiesta en dificultades para caminar y mantener el equilibrio.
- Incapacidad para Tragar:
- En casos más graves, tanto caballos como humanos pueden experimentar dificultades para tragar.
- Convulsiones:
- Algunos individuos afectados pueden desarrollar convulsiones, especialmente en etapas avanzadas de la enfermedad.
- Cambios en la Personalidad:
- En caballos, se pueden observar cambios en la personalidad, como la pérdida de docilidad.
- Parálisis:
- En casos severos, la enfermedad puede progresar a la parálisis, afectando diversas partes del cuerpo.
Medidas para evitar la propagación
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) declaró el estado de emergencia sanitaria en todo el territorio nacional debido a la Encefalomielitis Equina. Esta decisión responde a los brotes iniciales identificados en Corrientes y Santa Fe, así como al aumento significativo de casos sospechosos con síntomas y mortalidad en las últimas 72 horas.
La Resolución 1219/2023, publicada en el Boletín Oficial, establece medidas urgentes para contener la propagación del virus y proteger la salud tanto de animales como de la población. La declaración de emergencia busca abordar rápidamente la situación, implementando estrategias preventivas y de control para salvaguardar la salud pública y la fauna afectada.
¿Qué medidas dispuso Senasa?
En respuesta a los recientes brotes de Encefalomielitis Equina en Corrientes y Santa Fe, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) implementó medidas sanitarias de carácter inmediato, extraordinario y de contención. La restricción de movimientos de equinos desde las provincias afectadas al resto del país, dictada en la Disposición 363/2023 del lunes pasado, fue ratificada como una medida crucial.
La disposición también establece requisitos adicionales para eventos que congreguen equinos, exigiendo la comprobación de una vacunación vigente contra la Encefalomielitis Equina del Este y del Oeste, aplicada al menos quince días antes del traslado en todo el país. La Dirección Nacional de Sanidad Animal del Senasa está facultada para evaluar excepciones y adoptar medidas complementarias de emergencia en base a la evaluación de riesgos.
Además, se autoriza al Senasa a establecer normas adicionales que impliquen medidas de control, prevención y vigilancia, con el objetivo de contener, prevenir y controlar la enfermedad, preservando el estatus sanitario del país. Estas medidas se regirán por criterios y lineamientos internacionales.
La declaración de emergencia no solo responde a los casos registrados, sino también a las condiciones climáticas y ecológicas propicias para la presencia de los vectores transmisores. Además, la notificación de casos es esencial para mantener el acceso a los mercados internacionales de productos y subproductos basados en equinos.
Finalmente, el Senasa aconseja el control de lugares propensos a la proliferación de mosquitos, la vacunación de los caballos (coordinada con cámaras de productos veterinarios para una distribución eficiente) y la notificación inmediata en caso de síntomas. Estas acciones son cruciales para preservar la salud de los equinos y minimizar el riesgo de propagación de la enfermedad en animales y humanos.
