La super gala del martes en Masterchef celebrity Argentina fue “una noche atípica”. Así lo dijo su conductor, Santiago del Moro y advirtieron el jurado: “Son tres programas distintos” dijo Germán Martitegui; “Va a ser un lío hoy” mencionó Donato De Santis.
Para el desafío los participantes debieron dividirse en grupos, la tarea consistía en competir entre ellos enfrentándose uno a otro con tres platos distintos. La dificultad estuvo en que, independientemente de que cada uno le ganara a su competidor en la prueba individual, sólo podrían subir al balcón como equipo.
Los grupos se decidieron al azar: Charlotte Caniggia conformó grupo con el músico Juan Levinton, y la influencer Juariu, quien no tardó en “mandar al frente” al músico mencionando que lo había stalkeado en las redes y había descubierto que estuvo cerca de Charlotte.
Enseguida, la modelo exclamó “Él es mi amigo”, “Me parece que somos un dúo explosivo destinado a ganar” dijo Levinton. A pesar de que a lo largo de la jornada circularon frases en doble sentido como: “A mí me gusta todo de Charlotte” lo cierto es que este no era el mejor día para la mediática.
El portador de la medalla de plata, Kablan fue quien decidió las duplas, Charlotte se enfrentó a Marcela La Tigresa Acuña. Mientras preparaba un panqueque de dulce de leche con chocolate se puso tan nerviosa al escuchar los gritos de sus compañeros que intentaban guiarla que soltó “¡Put…!” sin escrúpulos.
Charlotte estalló en Masterchef
“¡Son unos put…! ¡No los aguanto!” exclamó mientras sus compañeros, Levinton y Juariu reían. “Tu madre jamás te enseñó a usar esas palabras” le dijo la Influencer para cortar la tensión y agregar humor al asunto.
Charlotte logró ganar la competencia frente a La Tigresa, por su lado Levinton perdió contra Viciconte preparándo un plato francés, Croque madame y Croque monsieu; mientras que Juariu venció a Kablan al preparar una receta italiana, Saltimbocca a la romana con batata frita. Así, el equipo de la hija de Mariana Nannis se consagró el ganador de la noche subiendo al balcón. Los perdedores tomaron su delantal gris asegurando que la decisión del jurado había sido “una injusticia”.
