En la tarde de ayer hicieron la primera posta en Monasterio los integrantes del Rally de los Incas que viajan desde Buenos Aires hacia hacia el sur a lo largo de la costa atlántica para tomar un lugar de observación de ballenas en la Península Valdés y los espectaculares volcanes de los Lagos Chilenos antes de llegar a la costa del Pacífico de Chile, continuando por los altos Andes tomando paisajes tan diversos como el desierto de Atacama, la región vitivinícola argentina y el altiplano azotado por el viento.
El evento se completa con días inolvidables en la tierra de los incas visitando atracciones imperdibles como el Lago Titicaca, la antigua capital inca de Cusco, las Líneas de Nazca y, por supuesto, la imponente ciudad perdida de Machu Picchu antes del gran final que tendrá lugar en Lima, capital del Perú.
Los participantes del Rally de los Incas, mayoritariamente norteamericanos e ingleses, se detuvieron en Monasterio, tras haber partido el sábado 12 desde Buenos Aires.
Con este telón de fondo de impresionantes paisajes y rica herencia cultural, la competición de rallyes comprenderá una o dos secciones de prueba al día usando caminos alejados de gravilla y asfalto combinados con los excelentes circuitos de carrera que Sudamérica tiene para ofrecer.
Tras almorzar en Monasterio, dialogar con los habitantes del lugar y ocasionales turistas que se hallaban pescando en la zona, emprendieron el viaje con destino a Mar del Plata para luego hacerlo hacia Bahía Blanca.
Los competidores, tomaron fotografías de Monasterio, quedando maravillados por la vegetación y belleza natural del lugar. Prevén finalizar en 27 días en Perú para luego cada uno retornar a su respectivo país.-
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