La localidad de Pilar vuelve a ser escenario de un fuerte impacto laboral. La empresa Magnera, de origen estadounidense y especializada en insumos industriales, anunció el cese inmediato de sus operaciones en Argentina, dejando a más de 60 empleados sin trabajo.
La compañía producía materiales no tejidos y films utilizados en salud, higiene e industria, insumos claves para otras cadenas de producción. En un comunicado, la firma confirmó que cumplirá con los compromisos ya adquiridos con sus clientes, pero que las operaciones se detendrán de manera definitiva.
El CEO de la firma, Curt Begle, sostuvo que “esta decisión no se tomó a la ligera” y que responde a la necesidad de construir “una organización más eficiente, receptiva y sostenible, mejor posicionada para satisfacer las necesidades cambiantes de los clientes y del mercado”.
Un cierre que tiene historia
Magnera había nacido a fines de 2024, tras la fusión del negocio de no tejidos y films de Berry Global con Glatfelter. Ahora, la empresa explicó que el levantamiento de la operación en Pilar forma parte de un plan global de reestructuración.
Un distrito en alerta
El caso de Magnera se suma a otro golpe reciente: el cierre de la fábrica de cerámicos ILVA, también en Pilar, que a principios de septiembre despidió a 300 trabajadores.
Con estos dos cierres, el distrito atraviesa en menos de un mes la pérdida de más de 360 puestos de trabajo, lo que genera creciente preocupación entre los vecinos y el sector industrial local.