Desde el distrito de San Martín, Axel Kicillof encabezó un acto por los 500 días sin obra pública nacional y advirtió que votar a los representantes de Javier Milei pondría en riesgo el futuro de Buenos Aires.
El gobernador bonaerense eligió un escenario simbólico para su mensaje político: la Torre de Innovación Científico-Académica (TICA) de la Universidad Nacional de San Martín, una obra reactivada por la Provincia con una inversión de $3.685 millones tras haber sido abandonada por el gobierno nacional.
“La paralización de mil obras es una decisión criminal”, sentenció Kicillof, acompañado por los ministros Gabriel Katopodis y Silvina Batakis, el intendente Fernando Moreira y el rector Carlos Greco. Desde el escenario, denunció que las políticas de ajuste de Milei impactan directamente en la salud, la educación y la infraestructura básica de los bonaerenses.
“Cada vez que inauguramos una obra, los vecinos piden otra. El único que no lo entiende es Milei”, disparó el mandatario provincial.
La jornada no solo fue una crítica al freno de obras. También sirvió como plataforma de campaña. Kicillof advirtió que si la ciudadanía vota por los candidatos de La Libertad Avanza, “nos va a resultar prácticamente imposible seguir así”, y agregó: “La decisión de Milei es fundir a la Provincia y terminar con el federalismo.”
En un tono encendido, el gobernador pidió cerrar el paso al “topo” que quiere destruir el Estado, e instó a que no se le permita ocupar bancas en los concejos deliberantes ni en la Legislatura bonaerense.
“Hay que ofrecer una alternativa electoral que mire al futuro”, expresó Kicillof al cerrar el acto, llamando a la dirigencia peronista a explicar qué modelos están verdaderamente en juego en las próximas elecciones del 7 de septiembre.
