Un joven de 26 años se recibió de médico y su historia conmovió al país por todo lo que luchó para lograrlo: juntaba latas para poder vivir el día a día.
Se trata de Sixto Leiva, un chico entrerriano de la ciudad de Federación. De chico juntó latas, vendió torta fritas, repartió diarios y cortó el pasto para ayudar a sus padres, dos obreros. “Nací y crecí en un hogar con pobreza estructural. Soy hijo de dos obreros de Federación. Hice los estudios primarios y secundarios en una escuela pública de mi ciudad“, comentó.
El pasado 12 de marzo aprobó la última materia en la Universidad Nacional de Entre Ríos y se recibió de médico: “Rendí el ECOE, un examen integrador que presentaba una situación-problema de pediatría, medicina clínica, salud familiar, ginecología y emergentología”.
“Si bien soy consciente de todo el esfuerzo que hice, mis padres nunca permitieron que me faltara nada cuando estudié en Concepción”, explicó Leiva. Y agregó: “Valoro muchísimo el haber podido asistir a una universidad pública. Pude estudiar y recibirme. Siendo pobre, no habría podido pagar una privada. Tuve la Progresar y la Inaubepro, que es provincial. Todavía tengo la computadora de Conectar Igualdad, y te digo más: el trabajo final lo hice ahí”
