Un hombre de 55 años se cansó de la música de una iglesia evangélica, amenazó a los fieles con una azada y fue detenido por la policía. El sujeto explicó que hacía cinco años que los “venía aguantando”.
El hecho ocurrió el sábado poco antes de las 20 horas en un barrio de la ciudad de Bahía Blanca. Gustavo Girolami decidió acercarse con una azada en su poder a un templo de la calle Panamá al 3000. Allí, ingresó al lugar y comenzó a insultar a quienes se encontraban en su interior.
“Hace 5 años que les pido que bajen la música, siempre haciendo quilombo, nunca se puede descansar”, gritaba Girolame, según testigos. Incluso, relatan que mientras eso sucedía la música continuaba en su máximo volumen y le pedían al pastor que le pusieran “la sangre de cristo”.
Finalmente, el agresor que se cansó de la música de la iglesia cercana a su vivienda y amenazó a los fieles fue detenido por efectivos policiales de la Comisaría Séptima de Bahía Blanca; y quedó imputado por el delito de “amenazas agravadas”.
