En un evento significativo para la ciencia y la producción acuícola de la provincia de Buenos Aires, el ministro de Desarrollo Agrario, Javier Rodríguez, inauguró a las nuevas autoridades de la Estación Hidrobiológica de Chascomús. Este establecimiento, que lleva más de 80 años en funcionamiento, ha tenido un impacto vital en la investigación y la innovación en el sector. Este año, la estación destacó por la entrega de más de un millón de alevinos de pejerrey.
Importancia histórica de la piscicultura en Chascomús
La Estación de Piscicultura fue inaugurada el 7 de noviembre de 1943 y ha jugado un papel fundamental en el desarrollo de la acuicultura en la provincia. Rodríguez afirmó que “ha sido protagonista del desarrollo acuícola en la provincia y es un símbolo de nuestra vocación científica y productiva”.
Desde su inicio en 1904, con la introducción de técnicas de fecundación artificial, la estación ha evolucionado considerablemente, logrando producir millones de alevinos de pejerrey que se distribuyen no solo en la provincia, sino también en otras cinco provincias argentinas. Este año, alrededor de 4.000 estudiantes visitaron la estación, lo que subraya su rol educativo y de divulgación.
Nuevas autoridades y roles en la Estación
Las nuevas autoridades designadas para la Estación Hidrobiológica son Alfredo Astesuain, quien asumirá como Coordinador de Vinculación, y Juan Ignacio Fernandino, como Responsable Técnico. Rodríguez destacó su potencial, afirmando: “El potencial que tiene la Estación es enorme, no sólo desde lo educativo, sino también desde lo productivo”.
El ministro agregó que “creemos que desde este lugar se puede contribuir con más desarrollo local, más empleo y más producción”, enfatizando la necesidad de articulaciones con el sector privado para potenciar estos objetivos.
Logros contemporáneos y su impacto en la preservación
Desde su creación, la Estación ha cumplido un rol fundamental en la preservación de una de las especies más emblemáticas de la Provincia de Buenos Aires, el pejerrey. Actualmente, se llevan a cabo siembras en más de 50 lagunas públicas y privadas. Este proceso ha permitido mantener la biodiversidad y fomentar la actividad pesquera en la región, resaltando la importancia de la estación en el ecosistema local.
A medida que el programa avanza, la colaboración entre el Estado y el sector privado se convierte en un punto central para el crecimiento sostenible de esta actividad económica vital para la región y su comunidad.
















