La costa chaqueña está en alerta por la crecida del río Paraná que llegó a los 6,12 metros en el puerto de Barranqueras, por lo que el Comité Provincial de Emergencia dispuso medidas para la evacuación en distintas localidades costeras.
Pese a que el pico que alcanzaba hoy el río es 50 centímetros por debajo del nivel de evacuación, ya está en marcha el plan de contingencia.
En ese marco se estimó que 3.000 personas deberán movilizarse desde sus viviendas ubicadas en el valle de inundación del Paraná hasta lugares a salvo de la creciente que llegaría entre el domingo y el lunes con una marca de entre 7,50 y 8 metros en Barranqueras.
El fenómeno hídrico afecta a los municipios de Isla del Cerrito, Margarita Belén, Colonia Benítez, Barranqueras, Puerto Vilelas y Basail.
En el sur del Puerto Vilelas y en Basail la actividad productiva ganadera se verá afectada y deberán movilizarse alrededor de 20.000 animales.
Las diferentes áreas del gobierno provincial, conjuntamente con los municipios de las zonas ribereñas y las fuerzas de seguridad, están articulando las acciones claves para afrontar la crecida de los ríos.
El secretario de Gobierno y coordinador de la Junta Provincial de Defensa Civil, Rodolfo García, indicó que en la Comisión Provincial de Emergencia se articularon las acciones necesarias para hacer frente al pico de crecida previsto para el fin de semana.
El gobierno informó que el Ministerio de Salud Publica trabaja con acciones de salud preventiva y el Ministerio de Educación puso a disposición los establecimientos educativos para albergar a los posibles evacuados.
Las escuelas serán utilizadas como última opción, porque se pretende que los chicos no pierdan días de clase.
Del operativo participan también Prefectura Naval y el Ejercito Argentino que aportan personal y camiones para la logística.
Además, la Policía del Chaco trabaja activamente en garantizar la seguridad vial y los traslados necesarios en las zonas ribereñas.
