En un gesto de generosidad hacia la preservación histórica de la región, Eduardo Guerrero ha donado a la Municipalidad de General Madariaga un antiguo carruaje que alguna vez perteneció a la icónica figura de Felicitas.
Este carruaje, utilizado por Felicitas para viajar a la “Estancia la Postrera”, un establecimiento rural entre los partidos de Castelli y Lezama, ahora se convertirá en una pieza fundamental para contar la historia de la familia Guerrero, una de las más pioneras de la zona de Madariaga.
La Directora del Museo local, Magdalena Pinedo, expresó su entusiasmo al medio local El Mensajero de la Costa por este nuevo agregado al patrimonio cultural de la localidad y anunció planes para crear un espacio dedicado al carruaje, donde pueda ser exhibido de manera permanente.
En cuanto a las características del carruaje, se está llevando a cabo un estudio con la asistencia de un especialista, quien está elaborando un informe detallado sobre el mismo. Según Pinedo, este carruaje se denomina “ómnibus”, siendo un término distintivo para los carruajes privados de la época. Aunque comúnmente se conocen como “galeras” a los ómnibus públicos, en este caso, al tratarse de una pertenencia de Felicitas y formar parte de una colección privada, se le designa como “ómnibus”.
El carruaje ha sido cuidadosamente conservado a lo largo de las generaciones, formando parte de una extensa colección de carruajes propiedad de Eduardo Guerrero. La donación no solo proviene de él, sino también de otros miembros de su familia que compartían la propiedad del carruaje.
Foto: El Mensajero de la Costa
