El debate sobre la soberanía, la integración regional y el rol de los organismos multilaterales volvió a ocupar un lugar central en la agenda sudamericana durante el cierre del año. En ese contexto, una cumbre presidencial del Mercosur dejó definiciones políticas que impactan de lleno en una de las cuestiones históricas más sensibles para la Argentina.
El Mercosur fijó una posición común sobre Malvinas
Durante la 67° Cumbre de jefes de Estado del Mercosur, realizada en Foz de Iguazú, los países miembros aprobaron una declaración especial vinculada a la Cuestión Malvinas. El documento reafirmó el respaldo regional a los derechos soberanos de la Argentina sobre las islas y expresó un rechazo explícito a determinadas acciones impulsadas por el Reino Unido.
El texto fue acompañado por los presidentes de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, además del canciller de Bolivia, con la presencia de representantes de Estados Asociados como Chile y Panamá. El presidente Javier Milei participó del encuentro junto a sus pares regionales.
Rechazo a la explotación unilateral de recursos naturales
Uno de los ejes centrales de la declaración fue la condena a la exploración y explotación unilateral de recursos naturales en el área bajo disputa de soberanía. Los mandatarios consideraron que este tipo de acciones no se ajustan al marco del derecho internacional vigente.
Entre los puntos destacados del pronunciamiento, se subrayó que:
- La exploración de recursos renovables y no renovables sin acuerdo bilateral no es compatible con la Resolución 31/49 de la Asamblea General de la ONU
- Las medidas unilaterales afectan el clima necesario para retomar negociaciones diplomáticas
- La administración de los recursos en zonas en controversia requiere consensos previos
El respaldo regional a la posición argentina
El documento reafirmó el apoyo a los derechos legítimos de la República Argentina en la disputa de soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur. Además, recordó los compromisos asumidos por el Mercosur desde la declaración conjunta del 25 de junio de 1996, que estableció una postura común frente a la cuestión.
La posición regional refuerza el reclamo argentino en foros internacionales y consolida una estrategia diplomática basada en el acompañamiento político de los países vecinos.
Gestiones ante Naciones Unidas y reclamo diplomático
La declaración también incluyó un llamado a profundizar las gestiones ante la Organización de las Naciones Unidas. En ese sentido, los jefes de Estado acordaron:
- Solicitar una nueva intervención del secretario general de la ONU, António Guterres
- Impulsar la reanudación de negociaciones bilaterales entre la Argentina y el Reino Unido
- Promover una solución pacífica y negociada en el menor tiempo posible
El texto remarcó que la cuestión Malvinas constituye un asunto de interés regional, no solo bilateral.
Acciones legales y marco del derecho internacional
Otro punto relevante del pronunciamiento fue el reconocimiento del derecho de la Argentina a iniciar acciones legales frente a actividades no autorizadas en el área en disputa. Según el documento, estas iniciativas se enmarcan en el Derecho Internacional y forman parte de los mecanismos legítimos de defensa de los intereses nacionales.
La postura del Mercosur refuerza así la posibilidad de avanzar por vías jurídicas y diplomáticas frente a eventuales incumplimientos.















