En los últimos días, Mauro López, de 7 años, “había experimentado una leve mejoría, movía partes de su cuerpo, pero se informó que tenía muerte cerebral y finalmente falleció este sábado, tras semanas de lucha.
Con anterioridad, los médicos del CEPSI explicaron que “se logró lavar parte de la purpurina con lavados bronquioalveolares” y que de esa manera se pudo “oxigenar la sangre, con la esperanza de lograr su mejoría“, pero el principal daño estaba en su cerebro.
Francisco DÃaz