La historia ocurrió en inicio de abril, “era feriado y yo estaba trabajando en mi laboratorio fotográfico, entró un niño y me pidió barrer la vereda, le dije que por el momento no pero volvió a entrar segundos después y me dijo que el pasto estaba largo, que me lo cortaba” narró a Castellidiario Enrique Quintero, un fotógrafo de la ciudad de Dolores.
La historia siguió con Quinteros trabajando en sus quehaceres cuando el niño, Matias, ingresó nuevamente y le pidió un cuchillo, Quinteros fue, se lo alcanzó y vio que Matias estaba cortando el pasto a mano y con el cuchillo
“Salí y le dije que era una locura lo que hacia, y que dejara todo al tiempo que le pregunté porque lo hacia; “es que quiero unos botines que están en un negocio acá a la vuelta y mi mamá no tiene plata para comprármelos, por eso trabajo como un loco, porque los quiero”- respondió Matías-
Quinteros relató la historia y rescató “sabes que valoro, que el pibe no me vino a pedir plata, que no andaba mendigando, que lo que quería lo podía tener trabajando”
Y agregó “me acusaron de explotador”, dijo entre risas el fotógrafo “pero para que no haya malos entendidos tomé la decisión de sacarme una foto, publicarla y pedir ayuda, yo puse dinero y mucha gente colaboró así hasta que juntamos 5 lucas y le compramos zapatillas, botines y ropa entre todos” contó Enrique
Matias vive en Dolores, tiene 11 años y juega al fútbol en un club de esa ciudad y va a la escuela hace algunas horas, pasó por el negocio a mostrarle que los botines y la ropa están intactos.