La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) expresó su “más enérgico repudio” ante la confirmación de la condena contra la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, catalogando la situación como un “manoseo innegable a la democracia”. El sindicato denuncia un accionar del Poder Judicial que busca “proscribir dirigentes políticos” y ha decidido declararse en estado de alerta permanente y movilización.
Reacciones del sindicato
El líder del gremio, Rodolfo Aguiar, utilizó sus redes sociales para manifestar que “la Corte Suprema de Justicia acaba de pegarle un tiro en la nuca a la Democracia”. Aguiar argumentó que esta decisión podría romper “la paz social para siempre” y expresó su preocupación por la apertura de un “nuevo régimen dictatorial” en Argentina. El sindicalista también advirtió que “por estas horas expira el Estado de Derecho en nuestro país”.
Críticas a la decisión judicial
En un comunicado, ATE criticó de manera contundente la sentencia en la denominada “Causa Vialidad”. Desde el sindicato se señaló que la información sobre el fallo había sido anticipada e incluso promocionada por diversos medios de comunicación antes de su confirmación oficial. Según el gremio, “no es casual que hoy la Justicia encabece el ranking del mayor nivel de imagen negativa por parte de la sociedad”.
ATE sostiene que la causa ha estado “completamente manipulada” desde su inicio, y ha involucrado a jueces, fiscales, abogados y actores del poder político para llegar a la prohibición de la candidatura de Fernández de Kirchner. El sindicato advierte que “no podremos tener una democracia sana si la división de poderes se desdibuja”.
Implicaciones políticas
Desde ATE se considera que la resolución judicial “favorece al Gobierno de Milei”, al inhabilitar a una figura política que podría canalizar el descontento de la sociedad hacia el modelo económico y político actual. En este contexto, ATE ha decretado un estado de asamblea permanente y movilización en toda la Administración Pública, insistiendo en que “la democracia está en peligro” y que “el pueblo no va a quedarse de brazos cruzados”.
