La cantante se unió al grupo de famosos que decidieron visibilizar sus problemas de salud con el propósito de normalizar situaciones y frenar la estigmatización. La artista de pop alternativo reveló que convive con el síndrome de Tourette, un trastorno neurológico.
Celeste Esliman, médica neuróloga define el síndrome como un trastorno neuropsiquiátrico complejo que se caracteriza por presentar tics motores y/o vocales. Suele comenzar en la niñez y continuar, en muchas ocasiones, en la adultez.
Billie Eilish manifestó en el programa de Netflix No necesitan presentación, que fue diagnosticada a sus once años y aseguró que: “Nunca dejo de tener tics por completo porque hay algunos que hago constantemente, todo el día”.
“La persona empieza a manifestar ciertas sensaciones corporales, muchas veces referidas como ‘tensión interna’ o urgencia premonitoria, que culminan con uno o varios tics”, explicó Esliman en un diálogo con Perfil.
La especialista afirmó que los tics, motores como vocales, pueden ser simples o complejos. Los tics motores simples pueden ser gestos como la elevación de las cejas, los hombros o chasquidos con la lengua, mientras que los complejos hacen referencia a contracciones del torso o cuello/cabeza.
A su vez, los tics vocales pueden ir de lo simple como ladridos, carraspeos o gruñidos hasta manifestaciones más complejas como la repetición de frases oídas o propias, o la pronunciación repetida de insultos y palabras obscenas. Esto último se denomina “coprolalia”.
“Muevo la oreja hacia atrás, levanto la ceja, hago sonar la mandíbula, flexiono este brazo y este otro brazo, flexiono estos músculos…Son cosas que no notarías si sólo estás teniendo una conversación conmigo”, dijo la cantante estadounidense de 20 años
El tratamiento del síndrome de Tourette
En relación a su tratamiento la especialista expresó que “No existe un tratamiento curativo definitivo”. Pero aseguró también que los tics pueden fluctuar a lo largo de la vida “por lo que la educación al paciente y su familia es primordial”.
“La terapia conductual es el tratamiento de primera línea. En ciertas personas puede ser necesario el uso de fármacos, ninguno libre de efectos adversos, y estos tratamientos siempre deben ser supervisados por profesionales adversos”, enfatizó Esliman.
