Una mujer fue víctima de una gran estafa y confesó que llegó a pensar en quitarse la vida ante la crisis que está enfrentando.
Increíble pero real
Hilda Alarcón, una cocinera de 27 años, madre de una nena de 6 años, de General Güemes, Salta, denunció que fue estafada.
Un hombre la llamó por teléfono diciéndole que era empleado de una tarjeta de crédito de la que ella es clienta.
La persona le sugirió que transfiera su sueldo desde el banco a su cuenta de la tarjeta por motivos de seguridad.
La mujer le hizo caso al estafador y transfirió la totalidad de sus ahorros, 275.000 pesos, a la cuenta de su tarjeta.
Pocos minutos después, le notificaron de un préstamo aprobado por el banco por la suma de 2.300.000 pesos, que ella nunca había pedido, por el que ahora deberá pagar 48 cuotas de 230 mil pesos.
Sin respuestas
Hilda fue a la casa central del banco, donde le informaron que su préstamo ya había sido transferido y debía afrontar las cuotas.
La mujer reconoció: “Estuve a punto de suicidarme, no lo hice por mi hija de 6 años. No sé qué voy a hacer, de qué voy a vivir si a fin de mes el banco se descuenta todo mi sueldo, y aún así voy a quedar debiendo”.
Y agregó: “Todo lo que digo ya fue denunciado. Necesito la acción de la Justicia, urgente”.
