El electo intendente de Pinamar expresó que y se sorprendió por el estado en el que encontró la Municipalidad tras su primer visita a la misma, en el marco de la transición con las actuales autoridades.
Señaló el joven jefe comunal en un área clave del Municipio la Secretaria del sector tomaba cerveza con otros empleados en horas del mediodía.
Acotó que en la Dirección de Tránsito hay 24 vehículos inventariados, de los cuales funcionan tres: un auto, una moto y una bicicleta Y hay más: “En un área administrativa figuran 27 sillas, pero faltan 25”, agregó Yezza.
La situación económica es preocupante pero “Pinamar tiene la particularidad de que en los primeros 3 meses del año se recauda cerca del 50% del ingreso anual; no nos preocupa el pago salarial de enero sino más bien el de junio y julio, ya que queda una deuda flotante cercana a los 60 millones y un déficit operativo cercano a los 33 millones”, señaló a “La Nación”
Para cerrar el círculo de las tragicómicas “anécdotas”, Yeza contó que el municipio no pudo inaugurar la Fiscalía de Usurpaciones en estos 6 meses porque no se pudo instalar Wi-Fi.