El Senado de la provincia de Buenos Aires aprobó por unanimidad una ley que representa un paso significativo en la defensa de los derechos de las personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA). La iniciativa, impulsada por el diputado Diego Garciarena, busca garantizar una mayor inclusión, acompañamiento y acceso a servicios adecuados tanto para quienes tienen este diagnóstico como para sus familias.
Qué establece la nueva ley provincial sobre TEA
La norma sancionada adhiere a la Ley Nacional 27.043, lo que implica que la provincia deberá implementar políticas públicas concretas para mejorar la calidad de vida de las personas con TEA. Uno de los aspectos más relevantes es que las obras sociales y empresas de medicina prepaga tendrán un plazo de 120 días para incorporar las prestaciones que establece la normativa.
Entre los puntos destacados, se incluye:
-
La creación de un registro oficial de pictogramas, herramientas visuales que ayudan a las personas con TEA a comunicarse o ubicarse en el entorno.
-
La obligación de utilizar pictogramas oficiales en todas las dependencias públicas provinciales.
-
Las instituciones privadas con atención al público también deberán señalizar con estos pictogramas, con el objetivo de facilitar la autonomía de las personas con autismo.
“Una herramienta para lograr una sociedad más justa”
Tras la aprobación, el presidente del bloque UCR + Cambio Federal expresó: “Orgullo, emoción y responsabilidad con quienes lo necesitan”, reflejando el compromiso con la inclusión. Por su parte, el legislador Garciarena remarcó: “A través de esta ley pretendo otorgar a las personas con TEA una herramienta que los ayude en su tratamiento para lograr así una sociedad más justa e igualitaria”.
Con esta sanción, la provincia de Buenos Aires se suma al desafío de garantizar entornos accesibles, comprensibles y empáticos, favoreciendo el desarrollo pleno de miles de bonaerenses con autismo.
Estos pictogramas, que emplean símbolos, imágenes y letras, estarán disponibles en todas las dependencias públicas y podrán ser utilizados por entidades privadas que deseen colaborar con la inclusión de las personas con TEA.
