Luis Carlos Alonzo, de nacionalidad paraguaya, de 25 años de edad, estaba acusado de torturar, violar y asesinar a una nenita de 2 años, que era su hijastra, en Derqui, partido de Pilar. Por el hecho, Alonzo se encontraba detenido en la Alcaldía de San Martín, en donde apareció muerto en su celda individual
Alonzo, apareció muerto colgado con su ropa de uno de los barrotes de su celda. Los penitenciarios a cargo de su cuidado sostuvieron que “ellos pasaron a la medianoche y vieron todo en perfecto estado en su celda” lo que se da que estaba con vida. Luego tras otra recorrida por la celda a las 1 de la madrugada “estaba ahorcado colgado con una de sus prendas de vestir” en uno de los barrotes del techo.
El caso es investigado por la fiscal Gabriela López, de la UFI temática de Asuntos Penitenciarios de San Martín, quien ahora tendrá que confirmar si se trató de un suicidio, que con la muerte de Alonzo
El caso trascendió el jueves, cuando Alonso fue acusado por torturar y abusar sexualmente a la menor, que le terminaron provocaron la muerte. La niña tenía heridas de quemaduras de cigarrillos y marcas que indican que el agresor apoyó en la criatura un objeto metálico caliente.
El hombre, padrastro de la víctima, se dio a la fuga pero luego pudo ser capturado, aunque ante la Justicia negó cualquier tipo de agresión hacia la menor. Respecto de las quemaduras, aclaró a la jueza que ante el frío, en Paraguay suelen calentar los cuerpos de las personas sobre ladrillos. Al ser consultado sobre la madre de la menor fallecida, sostuvo que ella es quien no quiso llevar antes a la nena al hospital, temiendo que le quiten la tenencia.
Hasta ese momento, la causa se orientaba a suponer que la madre de la pequeña que perdió la vida también era una víctima. Pero el resultado de la autopsia del cuerpo de la beba abrió la investigación. Los estudios indicaron que tenía lesiones anteriores al último ataque sexual. En consecuencia, ahora el caso se encara de otra manera y se enfocarán también en la responsabilidad de la madre por los abusos y muerte de la pequeña víctima.
La fiscal a cargo de la causa Carolina Carballido interpretó que hubo abandono de persona por parte de la madre, Celina Benítez, de 22 años. Es decir, Carballido cree que Benítez sabía de las agresiones que sufría la beba pero nada hizo para frenar la situación y solicitó su detención, que fue ordenada luego por el Dr. Saetone, del Juzgado de Garantías nº 7 de Pilar.-
///Es La Hora—-