Todos x Luna; la campaƱa solidaria por una beba que se hizo viral

Francisco DĆ­az

Luna es una hermosa beba que nació el 2 de enero pasado en la ciudad bonaerense de Zárate y actualmente, se encuentra internada en el Hospital de Niños Sor María Ludovica de La Plata, tras haber sido diagnosticada con Fibrosarcoma Congénito (tipo de cáncer que se forma en el tejido fibroso conjuntivo).

A raíz de varias publicaciones que han hecho sus padres, Lucía y Emiliano, en las redes sociales, relataron que en el Hospital recibió tratamiento de quimioterapia, pero los resultados no han sido los esperados.

Entonces sólo queda una opción tratándose del medicamento llamado “Vitrakvi (Larotrectinib)”, pero el inconveniente radica en que el Ministerio de Salud de la Nación aún no aprobó este medicamento y la pequeña Luna no puede comenzar su batalla contra la enfermedad.

Es por eso que sus padres salieron desesperados en las redes a pedir ayuda: “Solo pido que me ayudes a viralizar mi situación así cuanto antes podremos comenzar el tratamiento”.

No obstante, una familia de la provincia de Córdoba les donó un frasco del medicamento para que Luna empiece el tratamiento, pese aún no estar aprobado.

La carta de los padres de Luna

“Somos los papás de Luna. Queremos agradecer infinitamente a todas las personas que están compartiendo y haciendo visible la situación de nuestra beba de dos meses que fue diagnosticada con cáncer”, relataron Lucía y Emiliano en una publicación de Instagram. En el mismo posteo, resaltaron: “La calidad humana y profesional de los médicos de la Sala 11 de Neonatología que sigue dando lo mejor para Luna, no tiene precio. Sin ellos, nada hubiese sido igual”.

“Agradecer es poco. Gracias al Hospital, nuestra bebe hoy puede estar con nosotros y continuar con su tratamiento oncológico. Hoy les decimos gracias!!!”, agregaron.

A su vez, afirmaron que se realizará una colecta “y todo lo recaudado será para este Hospital que nos contuvo, que nos alivió en los momentos de tanto dolor y noticias fuertes”, en referencia al Sor Ludovica.

Por último, concluyeron: “Nuestra lucha recién comienza. Seguramente en el camino nos encontraremos con miles de laberintos por transitar, buenos y de los otros, pero con la fe inalterable de poder curar a nuestra hija”.

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