En la tarde de este lunes 7, vecinos del paraje Guerrero ubicado en el límite entre los distritos de Lezama y Castelli, advirtieron que en la zona cercana a la autovía 2 sobre el río Salado, había “algo que se movía”.
La sorpresa fue grande cuando se dieron cuenta que se trataba de un elefante marino.
Inmediatamente notificaron de tal hallazgo a las autoridades municipales de Lezama, constituyéndose en el sitio profesionales del área de Zoonosis y de Seguridad del Municipio.
Este tipo de especies no son de agua dulce, por lo que pueden sufrir severas consecuencias por estar mucho tiempo en un río.
Según pudimos saber, en una primera instancia se hace “un avistaje” y un seguimiento para evaluar la conducta del animal, a la espera de que simplemente se marche hacia zonas que le son más favorables y simultáneamente se da cuenta de la situación al Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible (OPDS) y en el caso que no vuelva por sus propios medios se coordina un rescate coordinado entre Defensa Civil, Bomberos Voluntarios, Comando de Prevención Rural, Zoonosis y Secretaría de Seguridad, además de veterinarios del OPDS En ese caso y si el elefante marino se encuentra en buenas condiciones de salud, se lo devuelve al mar en la zona de San Clemente del Tuyú.
Vale recordar que en el mes de marzo del año en curso apareció en el Canal 18 del distrito de Lezama un ejemplar hembra de elefante marino, el cuál pudo ser rescatado dos meses más tarde mediante una ardua tarea que demandó casi 10 horas de labor y un gran movimiento de personal, profesionales y equipamiento que pudo colocar al mamífero en un rodado y trasladado hacia la bahía de Punta Rasa, ubicada en el extremo sur de la Bahía de Samborombón, y en el extremo norte del cabo San Antonio, en el Partido de La Costa.
Cabe consignar que el elefante marino sudamericano habita en el Atlántico, específicamente en el litoral del Uruguay, las costas del mar Argentino, la Patagonia y las Islas Sándwich e Islas Malvinas. Es una especie clave del ecosistema costero, que se desplaza ampliamente en la plataforma continental. Las hembras suelen ser más costeras que los machos.
En este caso se evalúa los lineamientos a seguir al tiempo que se solicita a los vecinos no acercarse al lugar donde se encuentra el animal a efectos de no provocarle perjuicio alguno.
