El veterano de Malvinas Julio Aro y el británico Geoffrey Cardozo fueron postulados al Nobel de la Paz por su trabajo para ayudar a identificar a los caídos que se enterraron en el Cementerio de Darwin.
“En caso de resultar premiados, los ganadores serían todos mis compañeros que no volvieron y cada una de esas madres que los parieron”, expresó Julio Aro sobre su nominación.
Tras la guerra de 1982 en Malvinas, Geoffrey Cardozo (oficial inglés) se encargó del armado del Cementerio de Darwin. Sin embargo, habían pocos objetos que permitieran la identificación de los cuerpos; por lo que 122 tumbas solo llevaban la inscripción “soldado argentino solo conocido por Dios”.
Ante esto, Julio Aro, quien también participó de la guerra con el Regimiento de Infantería 6, colaboró con Cardozo en el Plan Proyecto Humanitario “Malvinas”. De esta forma, ambos iniciaron su plan para identificar a los caídos enterrados en el cementerio de Darwin.
Así, Cardozo y Aro fueron postulados al Nobel de la Paz. Al respecto, Aro contó en diálogo con DEF detalles sobre los desafíos que tuvieron en este recorrido; además, habló sobre la Fundación “No me olvides” y recordó su compromiso con las familiar que entregaron a sus hijos a la Patria en 1982.
Inicios del Plan Proyecto Humanitario “Malvinas”
“Arrancamos en 2008, sin saber qué es lo que íbamos a hacer. En abril de ese año, yo estaba en las islas. Había ido a buscar al Julio Aro que dejé. Fui también a buscar a compañeros que había enterrado y no encontré”, relató julio Aro sobre los inicios del proyecto.
A esto, agregó que se puso “el lugar de ellos”, ya que si le hubiera tocado permanecer en las islas, él “hubiera sido uno más”; ya que no tenía su “chapita”. Ante este impacto emocional, Aro relató que entendió, tras mucho tiempo “el dolor y sufrimiento de las madres”, ya que la suya le dijo que no habría pasado un segundo de su vida sin buscarlo.
Fundación “No me olvides”
Ese mismo año (2008) hicieron un proyecto con madres de solados argentinos e ingleses caídos; en el cual les preguntaron quién había ganado la guerra, pero no hubo respuesta ya que ambas perdieron a su ser querido. Tras esto, los ingleses los invitaron a Londres.
Así, en el 2008 el proyecto inició al ir a Londres con una “carga emocional muy fuerte” según relató Aro; ya que llegó allí el 17 de octubre, pero el 14 había enterrado a su hermano. Para comunicarse tenían traductores, y uno de ellos fue Geoffrey, con quien las charlas culminaban en un mismo deseo: recuperar la identidad de sus compañeros.
De esta manera y tras un encuentro con Geoffrey, surgió la sugerencia de crear una fundación; y así, nació la Fundación “No Me Olvides”. Luego, Hubo una ceremonia con todos los honores que hizo Cardozo un 19 de febrero de 1983, en el Cementerio de Darwin. “Se me pone la piel de gallina”, expresó Aro al recordarlo.
Formalización del Proyecto
Geoffrey anteriormente les habría entregado un sobre con información y coordenadas para la identificación de los cuerpos. En su momento, aunque todo estaba en inglés, les dijo “sabrán que hacer con él”. Con esta información inició la búsqueda de este proyecto que los llevó a la postulación del Nobel de la Paz.
Buscaron colaboración con varios funcionarios pero las puertas siempre se les cerraban; hasta que por intermedio de Gabriela Cociffi (Infobae) y una colega de ella, lograron que Roger Waters le hiciera llegar una carta a la presidente Cristina Kirchner. Tras esto, se anunció el proyecto.
Luego de ello, si los familiares estaban de acuerdo, se firmaba la documentación y se les hacía la muestra de sangre. Después, en el gobierno de Mauricio Macri, firmaron otro acuerdo e iniciaron los primeros trabajos.
Nominación al Nobel de la Paz
Tras la pregunta sobre su nominación al Nobel de la Paz, Aro contestó que la recibió “sorprendido”; ya que “no es la primera vez que los postulan”. A su vez, agregó que esta vez fue “con una injerencia mayor”.
“Me llegó un mensaje desde Noruega, porque habían aprobado los papeles. A partir de entonces, el teléfono no paró de sonar. Lo lindo de esto es que, en esta postulación, no solo están Julio y Geoffrey, sino que además están Antropología Forense, los gobiernos de ambos países, las embajadas”, acotó.
De acuerdo con Aro, hasta el momento han identificado a 115 compañeros y “faltan 7”. A su vez, explicó que continúan en la búsqueda de familiares. A su vez, hizo especial énfasis en el caso de Elma Pelozo, la primera madre que contactaron en el inicio de esta búsqueda; y quien con su ayuda, pudo viajar para despedirse de su hijo.
“Esa madre nos dio una cátedra de amor. Tiene 82 años, pero desde entonces, tiene 10 menos y hasta quiere volver a Malvinas”, expresó al respecto. Por último reiteró que, aunque no ha sido fácil y aunque le pudiera llevar la vida entera:
“Lo volvería a hacer un millón de veces más. Muchos de nosotros tenemos diferentes válvulas de escape, tal vez la mía es esto. Mis horas del día están dedicadas a los familiares. Tenemos jardines con los nombres de nuestros compañeros (…) Hay cosas muy lindas”.