En la provincia de Buenos Aires, la tranquilidad de sus rincones rurales se convierte en una opción cada vez más atractiva para quienes buscan alejarse del ajetreo urbano. Con paisajes que combinan naturaleza e historia, estos destinos ofrecen también propuestas gastronómicas y actividades al aire libre que prometen un fin de semana de desconexión.
Un destino rural para escapar del ruido: conocé Salvador María
A solo dos horas de La Plata, Salvador María emerge como un lugar ideal para quienes desean disfrutar de un entorno natural. Esta localidad, ubicada en el partido de Lobos, ha ganado popularidad gracias a su proximidad a la Laguna de Lobos y a su variada oferta de actividades al aire libre. Aquí, los visitantes pueden relajar la mente, degustar comidas típicas y participar en festividades que mantienen viva la tradición local, convirtiéndose así en un punto de encuentro para los amantes del campo.
Historia, tradición y una comunidad que sigue creciendo
El nombre de Salvador María recuerda al político del siglo XIX, Salvador María del Carril, vicepresidente de la Nación. La fundación de la estación ferroviaria en 1884, por el Ferrocarril del Oeste, marcó el comienzo de su auge. Hoy, este pueblo mantiene su esencia rural y un perfil turístico atractivo, caracterizado por su bulevar central adornado con palmeras y árboles, una iglesia activa y una comunidad que organiza festividades a lo largo del año.
Entre las actividades que se llevan a cabo, destacan la Fiesta de la Miel, donde apicultores y artesanos se unen para ofrecer degustaciones y espectáculos. Además, el mes de junio resalta con “Sabores Patrios”, un encuentro que incluye comidas criollas y ferias de emprendedores.
La Laguna de Lobos y experiencias únicas
La Laguna de Lobos, de 800 hectáreas, se presenta como uno de los principales atractivos de la región. Ideal para practicar pesca, remo, kitesurf y windsurf, también es un excelente lugar para el avistaje de aves y disfrutar de la fauna autóctona.
Por otro lado, la zona también alberga estancias que permiten disfrutar del emocionante mundo del polo, con torneos y prácticas que atraen tanto a aficionados como a turistas. Salvador María se propone así como un lugar ideal para disfrutar de la naturaleza, la gastronomía y la cultura, prometiendo una experiencia única a solo unos kilómetros de la ciudad.
