La jornada del domingo 22 de junio se perfila como otra muestra clara de que el invierno ya se instaló de lleno en la Provincia de Buenos Aires. Tal como ocurrió este sábado, el ambiente continuará frío, gris y ventoso, con características propias de una masa de aire polar en plena expansión. El cielo permanecerá mayormente nublado durante toda la jornada, y el viento será un protagonista indiscutido.
Según los modelos meteorológicos analizados, se espera que las temperaturas oscilen entre los 5 y los 12 grados. A lo largo del día, el viento rotará del Noroeste al Oeste y terminará soplando desde el Sudoeste, lo que provocará un descenso adicional en la sensación térmica.
Durante la tarde se anticipan ráfagas que podrían alcanzar los 69 km/h, aumentando la incomodidad térmica, especialmente en zonas del centro y sur bonaerense. Hacia la noche, la intensidad del viento irá disminuyendo gradualmente, pero el cielo continuará cubierto y el ambiente se mantendrá marcadamente frío. La probabilidad de precipitaciones es baja, aunque no se descarta la ocurrencia de lloviznas aisladas, especialmente en sectores del sudeste provincial.
Un inicio de semana bajo cero
El lunes 23 de junio se presentará aún más riguroso, con la llegada efectiva de una ola de frío polar. Para muchas localidades del interior bonaerense se espera una mínima de 0 a 1 grado, mientras que la máxima no superará los 7 a 8 grados. El viento del sudoeste seguirá presente y podrían registrarse lluvias dispersas durante la madrugada y la mañana, en un contexto de ráfagas que podrían llegar nuevamente a los 59 km/h.
El martes 24, en tanto, podría ser el día más frío de la semana. Se pronostica un amanecer con valores cercanos a -2 °C en varias localidades del interior provincial, y una máxima de apenas 10 a 11 grados, bajo cielo parcialmente nublado y con viento leve. Las heladas matinales serán generalizadas y no se descartan bancos de niebla en zonas bajas.
Qué es una ola de frío polar
Una ola de frío polar se define como un período de varios días consecutivos en los que las temperaturas mínimas y máximas se ubican muy por debajo de los valores normales para la época. En Argentina, se considera como tal cuando esta condición persiste al menos tres días seguidos, con heladas y una marcada irrupción de aire polar.
Este fenómeno se produce cuando una masa de aire extremadamente frío, originada en las regiones antárticas, logra avanzar hacia latitudes más templadas por ausencia de sistemas atmosféricos que la bloqueen. En su desplazamiento, estas masas suelen ir acompañadas de vientos intensos, lo que incrementa notablemente la sensación térmica.
Durante el invierno austral, además, la inclinación del eje terrestre reduce la intensidad solar en nuestra región, favoreciendo que el aire frío permanezca más tiempo sin calentarse.
Recomendaciones ante el frío extremo
Ante este escenario, se recomienda evitar exposiciones prolongadas al aire libre, especialmente en las primeras horas del día, ventilar adecuadamente los ambientes calefaccionados, y prestar atención a niños, adultos mayores y personas con enfermedades respiratorias o cardíacas, que constituyen los principales grupos de riesgo.
La Provincia de Buenos Aires enfrentará en los próximos días una de las semanas más frías del año. Todo indica que el invierno 2025 ha llegado con fuerza, y que aún queda un largo período de bajas temperaturas por delante.
