La penosa confirmación del hallazgo del cuerpo sin vida de la jovencita Navila Serena Garay, enterrada en una quinta de la ciudad de Chascomús ha conmocionado no solo a esa comunidad sino a la región toda.
Por el crimen fue detenido un sujeto identificado como Néstor Garay el cual en una primera instancia se señaló que se trata de un familiar lejano, aunque ello no fue confirmado oficialmente.
Fuentes cercanas al caso detallaron a INFOZONA que el sujeto se desempeñaba como parquero en una quinta cuyos propietarios no residen en Chascomús, quienes le habían avisado con antelación que el domingo necesitaban de su ayuda.
Al concurrir a la quinta el presunto femicida comentó a la esposa del dueño de la quinta que en el fondo había “enterrado un perro”.
Rato más tarde a la mujer se le ocurrió preguntarle que tipo de relación tenía con la jovencita desaparecida dada la coincidencia del apellido, a lo cual le respondió que eran “parientes lejanos” y que “la chica seguramente andaba por Lezama”.
Esta respuesta llamó mucho la atención de la dueña de la quinta y cuando Garay se retiró del lugar fue a ver el sitio donde dijo que había sepultado el perro y advirtió que la fosa tenía casi dos metros de longitud.
De inmediato dio aviso a las autoridades policiales cuyos peritos procedieron en la tarde/noche del domingo a excavar en el lugar y hallaron el cuerpo sin vida de la adolescente.
Mientras se efectuaba la excavación en la quinta, una comisión policial vigilaba los movimientos del sospechado en asesinar a la adolescente, procediendo a detenerlo y trasladarlo a la sede de la DDI de Dolores donde se halla desde anoche a disposición de la Justicia.
La autopsia de Navila que se realizará en la morgue judicial de Dolores este lunes, se conocerá mañana.
Garay en el momento de la detención, declaró ante las autoridades policiales que Navila fue a su casa y le pidió $ 3.000 y él le respondió que no tenía esa suma de dinero a lo que ella lo habría amenazado con denunciarlo por acoso sexual y reaccionó sin medir las consecuencias, reconociendo la autoría del hecho, aunque falta que declare y ratifique o rectifique tal declaración en sede judicial.
Familiares de la joven asesinada denunciaron públicamente que el sujeto no habría actuado solo y por lo menos tendría dos cómplices.
