En la ciudad bonaerense de Magdalena, las autoridades han logrado la detención de un individuo apodado “Emoji” quien se dedicaba a la caza ilegal y cruel de ciervos.
Gracias a exhaustivas tareas de inteligencia, que incluyeron análisis de cámaras de seguridad y rastreo en redes sociales, agentes policiales del CPR de Magdalena lograron identificar al depredador y llevarlo ante la justicia.
El individuo utilizaba un emoji para ocultar su rostro y disimular su crueldad mientras se fotografiaba junto a los ciervos, que posteriormente eran desmembrados por feroces perros entrenados para matar.
El impacto de esta captura ha causado asombro en la comunidad de Magdalena, que ya se encontraba consternada por una banda dedicada a la matanza de ñandúes en la misma localidad.
La banda, compuesta por cinco individuos provenientes de La Plata y Chascomús, fue desmantelada tras el descubrimiento de 20 cuartos de ñandú prácticamente descuartizados. Durante el operativo, se incautaron cinco cuchillas de carnicero y otros objetos punzantes utilizados en la caza. Además, se rescataron diez galgos que eran empleados para perseguir y cazar a los ñandúes.
La policía logró interceptar a los delincuentes en un Fiat Siena rojo, luego de una persecución a través de campos. Para poner fin a su desesperada huida, las patrullas bloquearon las rutas 20 y 59, en el ingreso a Ferrari. En esta operación, también se decomisaron varios galgos que eran utilizados en la caza de ñandúes, sin proporcionarles alimentos para aumentar su ferocidad.
“Emoji” ahora enfrenta las consecuencias legales de sus acciones, mientras que la comunidad de Magdalena empieza a recuperar la tranquilidad después de esta trágica serie de eventos.
