El aumento de las tarifas, la pérdida real del poder adquisitivo del salario y la disminución en la capacidad de ahorro de los empleados fueron temas de conversación. También se refirieron a las distintas problemáticas que día a día deben afrontar cada uno de los municipios.
Los funcionarios se mostraron preocupados ante los aumentos en los servicios y la manera en que afecta a la población, asimismo ratificaron que se necesitan políticas y acciones que beneficien a todos y en especial a los sectores más vulnerables, donde el estado debe estar presente dando respuestas a las necesidades cotidianas de la gente.
“Todas éstas son cuestiones que preocupan a todos por el grado de impacto negativo que conllevan, lo cual necesariamente los dirigentes políticos debemos analizar para poder revertir la situación” coincidieron ambos jefes comunales.