La empleada se comunicó con su encargada y le pasa el celular y el sujeto se aleja para hablar con ella. Cuando el supuesto proveedor terminó de hablar con la encargada,le dice a la empleada que está todo bien y que tenía que entregarle un monto cercano a los 5.000 pesos, más los paquetes de cigarrillos de Philips y Malboro que tenga para la venta, ya que se los llevaría para traer el nuevo diseño de cartón con el modelo del Mundial.
La empleada confiando que era verdad y que la encargada había dado el “OK”, accedió a darle la plata y cigarrillos que pedía. Hasta ese entonces no había nada raro, era sólo un supuesto proveedor mandado por los jefes.
Cuando el sujeto se retira, la empleada le manda una foto con la factura a la encargada y es en ese momento cuando descubrieron que habían sido estafados.
Se intenta localizar al estafador, para lo cuál se observaron las imágenes de las cámaras de seguridad del propio comercio y de la zona.
Hay un dato que no es menor: el estafador sabía los nombres tanto de los empleados como así también de los jefes.