El impactante hecho se dio a conocer el pasado jueves y tuvo lugar en una vivienda en la localidad de Metán, provincia de Salta.
La figura religiosa se la dieron a Rosana Mendoza Frías hace ocho años atrás, después de que perdiera a su bebé en el parto.
La primera vez que la Virgen se manifestó fue en abril del año pasado y “lloró” durante tres días consecutivos.
Según contó la dueña de la estatua, tras la publicación de una foto del fenómeno en las redes sociales, miles de personas fueron a conocerla y verla con su propios ojos.
Los peregrinos afirman que la Virgen ha realizado varios “milagros”, ya que luego de visitarla, muchos sanaron de algún mal o se salvaron.
“A una mujer le desapareció un tumor de ocho centímetros y un policía sobrevivió a un accidente que le ocurrió en pleno servicio”, daba como ejemplos Rosana a medios locales.
Además, la dueña de la estuilla contó que durante la semana, alrededor de 30 personas, le van a rezar a la Virgen.