El 3er Oficial del Cuerpo Activo de Bomberos Voluntarios de la ciudad de Castelli, Alberto ULLUA, consignó hace pocos minutos en su cuenta de Facebook lo siguiente:
“Doblete de rastrillaje. Por la mañana Puente Guerrero hasta Puente La Postrera y a la tarde Pesquero La Cascada, Puente de Pascua, Puente de Uranga ,Cruce Ruta 11 y se culmina desembocadura Canal 15.
Mis hombres y yo cocinados mal. Bomberos Voluntarios….. un orgullo”
Reiteramos que las autoridades judiciales que intervienen en el caso de la “desaparición” del joven Marcos Javier ENIS de 25 años de edad, oriundo de la ciudad de Dolores, ordenaron el “avistaje” por el Río Salado, para lo cual desde la Estación de Policía Comunal de Castelli solicitaron colaboración a los Bomberos Voluntarios de tal ciudad.
Debido a los resultados negativos, se amplió la cobertura de búsqueda al sector de la autovía 2 comprendido entre Chascomús y Dolores.
De tal forma, personal de la Policía Comunal de Lezama efectuaó un rastrillaje en la jurisdicción que le corresponde a la misma, obteniendo el mismo resultado. Ahora la búsqueda se amplió a los caminos rurales del Distrito de Lezama y Ruta Pcial. 57, contando con la colaboración de la Patrulla Rural de tal localidad.
Por su parte efectivos pertenecientes a la Jefatura Distrital de Dolores con asiento en Sevigné comenzaron en horas de la tarde de este lunes 30, la búsqueda desde tal paraje hasta Castelli.
Hasta este momento los resultados continúan siendo negativos.
No se descarta que en el día de mañana, martes 31 de diciembre se incorporen otros Cuarteles de Bomberos de la zona y de la Policía provincial en el río Salado como tampoco la cooperación de un helicóptero de la misma fuerza.
Sin dudas, es un enigmático caso que ya conmueve a toda la región, por cuanto desde que la cuñada de Enis lo dejara en la autovía 2 en Chascomús para que “hiciera dedo” y de tal forma regresara a Dolores, no se ha sabido absolutamente nada de él.
Autoridades judiciales y policiales reiteraron algunas de las características físicas del joven dolorense desaparecido, destacando que posee un tatuaje en una mano con el nombre de su hija “Sofía” y según indicaron sus familiares, sufre de ataques de pánico.
Al momento de su desaparición vestía un pulóver color verde musgo, un pantalón de jeans azul gastado, zapatillas de color oscuras marca Adidas. Se trata de una persona de contextura física delgada, mide un metro setenta y cinco de altura, pelo corto enrulado color negro, ojos verdes y posee el faltante de una pieza dentaria.
Cabe consignar que el operativo de “avistaje” sobre el río Salado se efectúa atento que la persona de que se trata, habría sido vista “sobre” el puente de Guerrero en el límite entre los Distritos de Castelli y Lezama respectivamente.
